Tras una complicada primera semana de marzo, los titulares siguen de cerca las acciones de la nueva administración estadounidense y los conflictos geopolíticos, lo que provoca fuertes movimientos en los mercados. Así comienza una nueva semana en la que se espera que estos factores continúen marcando el comportamiento de los mercados financieros mundiales.
El mundo inicia la semana asimilando las declaraciones de Trump del fin de semana, en las que anticipó una posible entrada en recesión de la economía de su país este año. Trump reiteró que su administración está implementando cambios sustanciales y que, si bien pueden generar turbulencias a corto plazo, asegura que traerán gran prosperidad en el futuro. A partir de esto, habrá que ver si el mercado es capaz de soportar una administración que, por momentos, se muestra errática e impredecible, lo que a llevado a que tanto compañías como consumidores actúen con mayor cautela.
La economía estadounidense está resistiendo mejor de lo esperado, según señaló el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, en sus declaraciones del viernes, el mismo día en que se presentaron los datos de empleo de EE. UU. Sin embargo, varios indicadores de inversión y consumo apuntan a una posible ralentización del crecimiento económico americano en los próximos meses.
Este último punto es el mayor temor de los mercados hoy, impulsado principalmente por la expectativa de un alza en la inflación, no solo en EE. UU., sino a nivel global debido a los aranceles. Esto ha provocado una caída en los rendimientos bursátiles del mercado estadounidense, con el S&P 500 y el Nasdaq cerrando su tercera semana consecutiva con pérdidas, y hoy no fue la excepción. A pesar de ello, como mencionamos anteriormente, Powell ofreció algo de optimismo al afirmar que el crecimiento económico no corre peligro y anticipó que la Reserva Federal no tiene prisa por realizar un nuevo recorte de tasas.
Así, Trump y los conflictos geopolíticos siguen acaparando la atención, mientras los mercados se mueven con cautela en un entorno de incertidumbre. Ahora, la mirada está puesta en el dato clave del IPC de EE. UU., que se publicará el miércoles y permitirá evaluar el impacto real de las medidas de Trump, además de ofrecer pistas sobre el futuro rumbo de la Fed en este primer trimestre del año.